Qué vas a ver
Trani es un puerto marítimo animado y elegante donde la historia y las tradiciones se fusionan en una unión indispensable con el mar. Apreciado por el castillo de Suabia, deseado por el emperador Federico II, donde vivía su hijo Manfredi, es sobretodo famoso por la catedral de San Nicola Pellegrino, que con su campanario de 60 metros se destaca como un faro en el mar Adriático. La majestuosa catedral, uno de los símbolos del románico de Apulia, da testimonio del esplendor del Trani medieval. Construido durante la dominación normanda del siglo XII, posee el típico estilo románico de Apulia, alzándose sobre tres iglesias superpuestas anteriores. Se accede desde el edificio cristiano que data del siglo IX y se dedica precisamente a Santa María, y luego se sube a la iglesia principal donde la luz que entra por los dos rosetones te dará una sensación de espiritualidad profunda y sincera como la «piedra de Trani«. Aquí podremos apreciar todos los elementos arquitectónicos del estilo románico y un maravilloso portal de bronce del siglo XII. El agradable paseo por el puerto, donde las voces de los pescadores se alternan con las de los marineros, nos hará apreciar el Palazzo Caccetta y la capilla de Todos los Santos desde donde los Caballeros Templarios tuvieron la última bendición antes de embarcarse en el viaje a Tierra Santa. Por último, pero no menos importante, un pescado frito con vista al mar acompañado de un moscatel local hará que este día sea inolvidable.
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